Indican que “La muerte de Cristo es el significado y la prueba más evidente de su perfecta humanidad, porque el muere como todos los seres humanos y nos asegura la vida eterna que parece lejana; pero, al contemplar la creación y todo lo que Dios ha diseñado, no existe razón por la cual se deba descartar la existencia de la vida después de la muerte. La muerte de Jesús, es la mayor prueba hacia los seres humanos, pues nadie tiene mayor amor que quien da la vida por sus amigos”, añaden los expertos en este tema religioso.

Sin embargo, mientras que unos aprovecharon los días de la Semana Santa para descansar y divertirse en diferentes centros de recreación ajenos a la iglesia católica; otros, durante el Jueves, Viernes y Sábado Santo, revivieron la Pasión, Resurrección y Muerte de Cristo y los principales misterios de la fe cristiana que permiten vivir no solo el recuerdo de una realidad actual, sino donde se demuestra cada año que él, vence con su amor al pecado y la muerte.

En varias partes del mundo, en nuestro país y desde luego en muchos de los 125 municipios de nuestra entidad jalisciense, se realizaron una serie de actividades y representaciones para recordar la muerte de Cristo. Lugares que ya se han convertido en una costumbre, como es el caso de San Martín de las Flores en el municipio de San Pedro Tlaquepaque, donde este año, se contó con una asistencia cercana a las 85 mil personas, entre habitantes del lugar y visitantes al evento.

Además, también se realizó la Judea o representaciones en vivo en algunos de los templos de la Zona Metropolitana de Guadalajara, en ciertas universidades y desde luego, también en Santa María de los Ángeles, Jalisco, donde dicha representación bíblica, ya se está convirtiendo en una tradición.

FOTOS de Chabelón Olague Escobedo.