La protesta y firma del documento se llevó a cabo en las afueras de la Unidad Médica Familiar (UNIMEF), de avenida Federalismo, el pasado 21 de marzo, donde se legalizó el documento que contiene la adhesión en la queja a derechos humanos y la demanda de amparo contra IPEJAL, por la serie de violaciones que se despliegan en contra de la parte más vulnerable que es el de los jubilados y pensionados de Jalisco, agremiados a esta institución.
Entrevistado por este medio de comunicación, Fernando Ramos Díaz quien fue convocado como abogado para la defensa al derecho de la salud de los jubilados y pensionados, indicó que se exigirá a las instancias correspondientes para que se les otorgue un servicio médico de calidad de acuerdo a la Ley de Pensiones.
Ramos Díaz enfatizó que con esta recolección de firmas, se busca de manera certera que se restauren los derechos adquiridos por lo jubilados; que por cierto, “nadie ha querido abordar y nadie se ha querido preocupar por un servicio tan transcendental como son los servicios médicos que transgreden a jubilados y pensionados de ambos sexos, especialmente, a aquellos que se encuentran dentro del grupo más vulnerable como son las personas de la tercera edad.”
Afirmó que ninguno de los frentes que se han levantado en contra de los hechos muy claros que afectan a los pensionados del Estado, le atoran al problema, porque parece ser que lo toman como un tema secundario, ya que quienes protestan a través de sus organizaciones, se interesan nada más por los malos manejos financieros y los desfalcos cometidos, que por los servicios médicos que se reciben en la actualidad, dentro de las clínicas de IPEJAL.
Para los jubilados actuales, lo más fundamental, debe de ser su salud que los estados financieros de la institución y es increíble, que les interese más el tema del dinero, ya que esto se presta a pretensiones personales y a ganar un capital político, que el propio derecho a la salud de quienes prestaron por años su servicio profesional a la sociedad jalisciense y en cuanto a los trabajadores activos, estos seguramente, están intentando garantizar un esquema de pensiones a futuro, expuso finalmente Fernando Ramos Díaz.
Por su parte, una de las maestras jubiladas que asistieron a este evento y que pidió no mencionar su nombre, al acceder a una breve entrevista, punteó su malestar al señalar que “Es muy lamentable, muy penoso y triste el ver la pasividad de los funcionarios de Pensiones del Estado, que parece no interesarles lo que sucede en la clínicas médicas, donde batallamos con el desabasto de medicinas, el alargamiento de las citas a estudios clínicos y con los especialistas, que se tardan de tres, cuatro o cinco meses y que no aparecen en la plantilla, porque los dan de baja y no avisan al paciente.”
Al referirse a los fraudes cometidos en la institución, la entrevistada afirmó que “Francisco Ayón López estuvo presente cuando se cometieron, no dijo nada al respecto y entonces por qué lo permitió, cuando su obligación y responsabilidad como funcionario de IPEJAL era la de velar por los intereses de los agremiados y defender los recursos de esta institución” y dónde está este ex-funcionario para que dé la cara y aclare este desvió de recursos. Parece ser que en estas fechas, también “Navegan para su barquito”.
Por último, muchos asistentes a este evento, reprobaron la actitud pasiva y desinteresada por parte del Secretario General de la Sección 47 del SNTE, Arnoldo Rubio Cárdenas, ya que parece ser que la consigna personal es la de no defender a sus representados, donde él, ha demostrado desde un principio, que se preocupa más por sus intereses personales y políticos, que el mismo beneficio de los integrantes de su gremio magisterial, caso concreto, el sector de los jubilados y pensionados, a quienes los tiene totalmente olvidados, por el mal servicio médico que en la actualidad reciben.
